Vivimos en una era donde todo puede ser compartido. Cada experiencia, cada logro, cada momento puede convertirse en una publicación. Pero en medio de tanta visibilidad, surge una pregunta incómoda: ¿para quién estamos viviendo realmente?
La ilusión de mostrarnos todo el tiempo
Con la facilidad que hoy tenemos para capturar y publicar, muchas personas sienten la necesidad constante de compartir su día a día. Desde lo que desayunan hasta el lugar donde pasan sus vacaciones, casi todo se vuelve público. Pero detrás de esa necesidad de mostrarse hay algo más profundo: una búsqueda de validación.
¿Es posible que estemos más enfocados en cómo se ve nuestra vida que en cómo se siente vivirla?
Publicar no está mal. Compartir es parte de nuestra naturaleza. Pero cuando la motivación principal es recibir atención, likes o aprobación externa, corremos el riesgo de alejarnos de lo que realmente importa.
El éxito según otros
También hemos adoptado una idea de éxito que no siempre nos pertenece. Se espera que estudiemos, trabajemos, ascendamos, acumulemos títulos, reconocimiento y cosas materiales. Y aunque todo eso puede tener valor, no siempre es sinónimo de realización personal.
Muchas personas invierten años en construir una carrera, en alcanzar metas que alguna vez alguien más definió como deseables. Pero en el camino, no se preguntan si realmente eso es lo que quieren. Lo hacen porque "así debe ser".
El problema no está en querer avanzar. El problema está en avanzar sin preguntarse si vamos en la dirección correcta.
La experiencia como valor olvidado
En el ámbito profesional, también se nota esta desconexión. Se priorizan los diplomas, las certificaciones, los cargos. Pero muchas veces se deja de lado algo esencial: la experiencia vivida.
Hay conocimientos que solo se obtienen haciendo. Hay habilidades que no se enseñan en una clase, sino que se desarrollan en el terreno. Vivir, equivocarse, adaptarse, resolver problemas reales: eso también es aprendizaje, y vale tanto o más que cualquier título.
Volver a valorar la experiencia —la propia y la de otros— es clave para reconectarnos con lo que importa.
Vivencias que no se publican
Todos hemos estado en lugares especiales. Momentos únicos, personas valiosas, experiencias irrepetibles. Y en muchos casos, lo primero que hacemos es sacar el teléfono. Tomar una foto. Grabar un video. Compartirlo.
Pero, ¿qué pasa cuando no hay nadie mirando? ¿Podemos vivir esos momentos con la misma intensidad? ¿O sentimos que algo falta si no lo publicamos?
Vivir para compartir puede alejarnos de la experiencia misma. Estar presente, con los sentidos atentos, sin la presión de mostrar nada, es una práctica que hemos perdido. Y sin embargo, es donde ocurre lo más verdadero.
Volver a lo esencial
Este no es un llamado a abandonar la tecnología ni a dejar de compartir. Es una invitación a hacer una pausa. A preguntarnos, con honestidad, si estamos viviendo según nuestros propios valores o simplemente reaccionando a lo que se espera de nosotros.
Volver a lo esencial no significa aislarse, sino reconectarse. Con lo que sentimos, con lo que queremos, con lo que somos. Significa mirar hacia adentro y validar nuestras decisiones desde ahí, no desde la aprobación externa.
¿Y ahora qué?
Tal vez sea momento de repensar algunas cosas:
- ¿Estoy haciendo lo que hago porque lo deseo o porque se espera de mí?
- ¿Comparto lo que comparto para conectar o para ser visto?
- ¿He construido una vida que me representa o una que agrada a los demás?
No hay respuestas correctas. Solo preguntas que vale la pena hacerse.
Únete a una Comunidad de Apoyo
Para apoyar aún más tu viaje en el desarrollo de hábitos positivos, considera usar Deeditt, una aplicación móvil donde las personas pueden compartir sus pensamientos positivos y aprender de las experiencias de otros. Ser parte de una comunidad que fomenta el cambio positivo puede brindarte el ánimo y la motivación que necesitas. En Deeditt, puedes conectarte con personas afines, celebrar tus logros y encontrar inspiración en los éxitos y estrategias de otros. Acepta el poder de la comunidad y haz que tu viaje de formación de hábitos sea aún más gratificante con Deeditt.
Fomentando una Mentalidad Positiva
En Deeditt, estamos comprometidos a apoyar tu viaje de crecimiento personal y pensamiento positivo. Creemos en la creación de una verdadera comunidad donde el apoyo mutuo es nuestra mayor fortaleza. Estamos aquí para escuchar tus comentarios y sugerencias, y siempre damos la bienvenida a un simple "hola". Juntos, podemos compartir nuestras experiencias, celebrar nuestras victorias y superar nuestros desafíos. Únete a nosotros en este viaje y apoyémonos mutuamente en el fomento de una mentalidad positiva y el desarrollo personal continuo. Tus comentarios y participación son lo que hace que esta comunidad sea fuerte y vibrante.
Photo by ISKRA Photography on Unsplash